Hace unos días, cuando todos empezaron a perder la fe en el mercado, yo casi lo hice también.
Cada gráfico se veía en rojo, cada voz sonaba cansada.
Pero entonces noté algo, una chispa pequeña que destacaba en el ruido. Era @syndicateio.
Mientras otros se quejaban, ellos construían en silencio. Sin exageraciones, sin atajos, solo trabajo real dando forma a la próxima fase de Web3.
Me recordó por qué creí en este espacio desde el principio.
Ahora, cuando la gente pregunta por qué sigo siendo optimista, les digo: porque he visto lo que
$SYND está construyendo y esto es solo el comienzo.