La tendencia durante las vacaciones de Navidad es relativamente tranquila, con disminución en el volumen y una convergencia en la volatilidad.

Tanto los alcistas como los bajistas no desean tomar una posición clara, sino que más bien digieren las ganancias previas mediante movimientos de consolidación.
En este momento, lo más importante es la moderación, no perseguir los precios, evitar decisiones emocionales,
controlar las posiciones, reducir la frecuencia de operaciones,
y esperar a que terminen las vacaciones y el flujo de fondos se normalice, para actuar en consecuencia.