
El trading de criptomonedas exige estrategias de gestión de riesgos que preserven el potencial de beneficio. La estrategia zero-cost collar es un enfoque táctico que consiste en ejecutar dos operaciones de opciones de forma simultánea, logrando un equilibrio entre protección ante caídas y potencial alcista en el volátil mercado cripto.
Un zero-cost collar es una estrategia financiera avanzada utilizada en trading de opciones, basada en los mismos principios que rigen los mercados tradicionales y aplicada igualmente en criptomonedas. También conocida como call collar al destacar la opción de compra, esta estrategia está diseñada para gestionar el riesgo de activos digitales como Bitcoin (BTC) y Ethereum (ETH) sin requerir capital inicial.
La estrategia zero-cost collar se compone de dos elementos ejecutados de manera simultánea. En primer lugar, el trader adquiere una opción put, un contrato que otorga el derecho, pero no la obligación, de vender una cantidad determinada de criptomoneda a un precio de ejercicio fijado dentro de un plazo concreto. Esta put funciona como seguro ante caídas de precio. En segundo lugar, el trader vende una opción call sobre la misma criptomoneda, ofreciendo al comprador el derecho a adquirir el activo a un precio específico en un periodo determinado.
El carácter "zero-cost" proviene de la estructura en la que la prima obtenida por la venta de la call compensa el coste de la put. Así, se genera una cobertura autofinanciada que protege la posición frente al riesgo bajista sin necesidad de inversión adicional. No obstante, esta protección implica una contrapartida: las ganancias que excedan el precio de ejercicio de la call pasarán al comprador de la opción, y no al titular de la criptomoneda, limitando el potencial alcista.
Para ilustrar la aplicación práctica de una call collar, supongamos el caso de un trader de Bitcoin. Imaginemos que posee un Bitcoin cotizando actualmente a 95 000 $. Ante la incertidumbre del mercado, pero sin intención de liquidar su posición, decide cubrirse del riesgo sin asumir costes adicionales mediante un zero-cost collar.
En primer lugar, el trader compra una opción put para un BTC con precio de ejercicio de 85 000 $ y vencimiento en tres meses. Esta put cuesta 4 000 $ y garantiza la venta de Bitcoin a 85 000 $, sin importar cuánto caiga el precio de mercado. En segundo lugar, para financiar la put, vende una opción call sobre el mismo Bitcoin, con precio de ejercicio de 110 000 $ y vencimiento también en tres meses. La prima obtenida por la venta de la call es de 4 000 $, compensando exactamente el coste de la put y convirtiendo la estrategia en zero-cost.
Al vencimiento pueden producirse tres escenarios. Si el precio de Bitcoin cae por debajo de 85 000 $, por ejemplo, hasta 75 000 $, el trader puede ejercer la put y vender BTC a 85 000 $, protegiéndose de pérdidas mayores. Si el precio sube por encima de 110 000 $, por ejemplo, hasta 120 000 $, el comprador de la call ejercerá su derecho de adquisición a 110 000 $, lo que implica que el trader pierde los 10 000 $ adicionales de ganancia, pero mantiene el beneficio entre 95 000 $ y 110 000 $. Si el precio se mantiene entre 85 000 $ y 110 000 $ hasta el vencimiento, ambas opciones expiran sin valor y el trader conserva su Bitcoin al precio de mercado, sin variaciones derivadas de las opciones.
El enfoque call collar aporta ventajas relevantes para la gestión de riesgos en el mercado cripto. La principal es que no requiere desembolso inicial: la prima por la venta de la call compensa el coste de la put, permitiendo cubrirse sin gasto extra y facilitando el acceso a traders con menor capital.
La estrategia ofrece cobertura efectiva ante el riesgo bajista al establecer un suelo en las pérdidas mediante la put. Si el mercado evoluciona negativamente, los traders cuentan con protección definida. Aunque la call limita la ganancia máxima, se conserva potencial alcista hasta el precio de ejercicio, permitiendo aprovechar subidas moderadas.
La flexibilidad y la personalización son otra ventaja determinante. Los traders pueden ajustar los precios de ejercicio de las opciones según su tolerancia al riesgo y expectativas de mercado, algo fundamental en entornos volátiles. Además, la estrategia ayuda a evitar decisiones emocionales al fijar niveles claros de venta y compra, y permite definir puntos estratégicos de entrada y salida para mejorar la planificación global del trading.
A pesar de las ventajas en la gestión de riesgos, la call collar tiene inconvenientes importantes a considerar. El más relevante es el tope al potencial alcista: al vender una call, el trader acepta vender su criptomoneda a un precio determinado, renunciando a las ganancias por encima de ese nivel si el mercado sube considerablemente.
La estrategia implica una curva de aprendizaje elevada, ya que operar con opciones resulta más complejo que las transacciones directas de activos. Requiere conocimiento profundo de las opciones collar, lo que puede dificultar la operativa a perfiles menos experimentados. El coste de oportunidad es otro aspecto: si el mercado no evoluciona según lo previsto y ambas opciones expiran sin valor, el trader puede perder la posibilidad de beneficiarse plenamente de movimientos favorables.
Las dificultades para ajustar la estrategia en situaciones cambiantes también son relevantes. Modificar un call collar puede resultar complejo y generar costes de transacción adicionales, reduciendo la eficacia global. En opciones de tipo americano, existe riesgo de asignación anticipada en las calls vendidas, lo que puede interferir en la planificación del trader. Por último, la utilidad de la estrategia depende de la volatilidad: en mercados menos dinámicos, los beneficios pueden no compensar los costes y limitaciones inherentes.
La estrategia zero-cost collar, o call collar, es una herramienta avanzada de gestión de riesgos para traders de criptomonedas que buscan equilibrar protección frente a caídas y potencial alcista. Al combinar la compra de puts y la venta de calls de forma simultánea, es posible cubrir posiciones sin costes iniciales, fijando tanto un suelo en las pérdidas como un techo en las ganancias. Este enfoque resulta especialmente valioso en mercados volátiles, donde las oscilaciones de precio son intensas e impredecibles.
Sin embargo, la call collar implica cierta complejidad y limitaciones. Si bien protege frente a pérdidas significativas y conserva parte del potencial de beneficio, también limita las ganancias máximas y exige dominio de la operativa con opciones. La decisión de utilizar un zero-cost collar debe basarse en la tolerancia al riesgo, la visión de mercado y la experiencia de cada trader. Para quienes aceptan un potencial alcista acotado a cambio de mayor protección, el call collar puede ser una herramienta eficaz en una estrategia integral de gestión de riesgos en trading de criptomonedas.
Un call collar es una estrategia de opciones que combina una posición larga en acciones, una call cubierta y una put protectora. Limita tanto el riesgo de caída como el potencial de ganancia, ofreciendo equilibrio entre protección y oportunidad de beneficio.
En cripto, estar 'collared' significa aplicar una estrategia collar con opciones para limitar tanto las ganancias como las pérdidas posibles en trading.
Un collar suele considerarse una estrategia bajista para el corto plazo, manteniendo una visión alcista a largo plazo sobre el activo subyacente.
La estrategia put call collar combina una posición larga en acciones con una call cubierta y una put protectora. Limita tanto las pérdidas como las ganancias potenciales, y ofrece un enfoque equilibrado para la gestión de riesgos en trading de opciones.











