En las recientes conversaciones económicas y comerciales de alto nivel entre China y Estados Unidos, el resultado es evidente: no habrá avances sustanciales. Como discípulo de Soros, Bessent tiene una naturaleza especulativa profundamente arraigada, pero en el ámbito político no habrá ninguna conducta especulativa. Recordando la guerra financiera de 1998 en Hong Kong, el resultado final fue que el equipo de Soros regresó con las manos vacías. Así que hoy, las conversaciones económicas y comerciales nuevamente terminarán sin resultados, sin obtener ninguna ventaja.