
Core chain representa una propuesta innovadora en tecnología blockchain, diseñada para conectar la reconocida seguridad de Bitcoin con la versatilidad de los contratos inteligentes de Ethereum. Al implementar el consenso Satoshi Plus, Core chain crea un ecosistema único que aprovecha las fortalezas de ambas criptomonedas principales, resolviendo sus limitaciones en escalabilidad y funcionalidad.
Core chain es una plataforma de próxima generación que ocupa una posición singular en el ecosistema cripto al combinar la infraestructura de seguridad de Bitcoin con la compatibilidad con Ethereum Virtual Machine (EVM). Su base se sustenta en el mecanismo de consenso Satoshi Plus, una fusión innovadora de Delegated Proof of Work (DPoW) y Delegated Proof of Stake (DPoS), que da lugar a una red robusta y escalable.
Con DPoW, los mineros de Bitcoin pueden ampliar su alcance más allá de la red de Bitcoin, delegando su potencia de hash a los validadores de Core chain. Este enfoque permite que los mineros obtengan recompensas adicionales en tokens CORE sin incrementar el consumo energético ni comprometer la seguridad de Bitcoin. Basta con adjuntar los datos de validadores a las transacciones de bloques minados, contribuyendo de forma simultánea a ambas redes.
El componente DPoS incorpora la gobernanza comunitaria, habilitando a los titulares de tokens CORE a participar en la seguridad de la red mediante votación de validadores. Así, el poder se distribuye entre la comunidad, garantizando la descentralización y el carácter participativo de la red. La combinación de ambos mecanismos genera un modelo de seguridad eficiente y resistente a la centralización.
La compatibilidad EVM distingue a Core chain, permitiendo migrar aplicaciones de Ethereum sin grandes modificaciones de código. Este factor abre la puerta a un extenso ecosistema de aplicaciones descentralizadas en ámbitos como finanzas descentralizadas (DeFi), gaming, tokens no fungibles (NFT) y más sectores.
El consenso Satoshi Plus en Core chain supone un avance fundamental en seguridad blockchain, creando un sistema de defensa multinivel que combina la potencia de hash de Bitcoin y la seguridad comunitaria basada en staking de tokens.
El componente DPoW aprovecha la infraestructura de minería de Bitcoin, cuya resiliencia está probada tras más de una década. Los mineros delegan su potencia de hash a los validadores de Core chain, aportando seguridad de nivel Bitcoin sin aumentar el gasto energético. Esta relación simbiótica beneficia a ambos: los mineros reciben recompensas en tokens CORE y Core chain accede a la tasa de hash más potente y segura del sector.
El mecanismo DPoS complementa el sistema distribuyendo la responsabilidad de la seguridad a toda la comunidad. Los titulares de CORE hacen staking y votan por validadores de confianza, asegurando que el control de la red no se concentre en unos pocos, sino se reparta entre participantes con intereses en el éxito colectivo.
La combinación de estos mecanismos crea barreras muy sólidas frente a ataques habituales en blockchain. Un ataque del 51 % requeriría controlar la mayoría de la potencia de hash de Bitcoin y una parte relevante de los tokens CORE en staking, lo que resulta económicamente inviable. Los ataques Sybil se disuaden por el elevado coste de adquirir suficiente hash y tokens, y los ataques de largo alcance se previenen mediante puntos de control periódicos, que protegen los datos históricos y evitan reorganizaciones maliciosas.
Core chain presenta ventajas notables sobre Bitcoin y Ethereum, ya que resuelve sus principales limitaciones sin renunciar a sus fortalezas clave.
En escalabilidad, Core chain supera ampliamente a Bitcoin y Ethereum. Mientras Bitcoin procesa unas 5-7 transacciones por segundo y Ethereum alrededor de 15-30 TPS, la arquitectura de Core chain permite una capacidad muy superior gracias a su DPoS optimizado. Esta escalabilidad la hace idónea para aplicaciones de alta frecuencia como protocolos DeFi, plataformas de gaming y mercados que requieren procesamiento rápido.
La interoperabilidad es otro punto fuerte. La compatibilidad EVM facilita la integración con el ecosistema de Ethereum, permitiendo migrar aplicaciones con ajustes mínimos. Las funcionalidades cross-chain facilitan transferencias de activos y datos entre Core chain, Bitcoin y Ethereum, creando un entorno blockchain más interconectado. Los desarrolladores pueden aprovechar código Solidity y herramientas conocidas, reduciendo la barrera de entrada para construir en Core chain.
Core chain mantiene una alineación total con los principios de seguridad de Bitcoin gracias al consenso Satoshi Plus. Al emplear la potencia de hash de Bitcoin (DPoW), hereda la seguridad de Bitcoin sin renunciar a la descentralización ni a la eficiencia energética. Este nivel de protección supera a las redes PoS independientes.
La baja latencia y el alto rendimiento de Core chain permiten aplicaciones responsivas y en tiempo real. Procesa las transacciones más rápido que Bitcoin y Ethereum, lo que la convierte en la opción ideal para plataformas descentralizadas, juegos o redes sociales que requieren confirmación inmediata y alta interacción de usuarios.
Core chain es una plataforma de contratos inteligentes descentralizada que combina la seguridad de Bitcoin y la flexibilidad contractual de Ethereum. Los usuarios disfrutan de una red que respeta los valores de Bitcoin, pero con la innovación y versatilidad del ecosistema Ethereum.
El enfoque de Core chain con los contratos inteligentes y las aplicaciones descentralizadas demuestra su compromiso con la accesibilidad para desarrolladores y el crecimiento del ecosistema.
La compatibilidad EVM es fundamental para sus capacidades de contrato inteligente. Los desarrolladores pueden utilizar Solidity, el lenguaje estándar de Ethereum, sin aprender nuevos lenguajes ni frameworks. Así, la migración de DApps de Ethereum a Core chain resulta directa, permitiendo aprovechar la seguridad y el rendimiento de Core chain sin necesidad de grandes cambios. Por ejemplo, un protocolo DeFi en Ethereum puede desplegarse en Core chain con ajustes mínimos y beneficiarse de la seguridad de Bitcoin y mayor velocidad.
La compatibilidad cross-chain amplía el alcance de Core chain, permitiendo interacción con diferentes redes blockchain. Mediante puentes especializados, facilita transferencias de activos y datos entre Bitcoin y Ethereum. Esta capacidad es muy valiosa para DApps que requieren liquidez o información de varias fuentes, operando sin depender de intermediarios centralizados. Una plataforma descentralizada cross-chain puede agregar liquidez de varias redes y ofrecer mejores opciones de trading y mayor profundidad de mercado.
La gobernanza descentralizada es clave en la evolución de Core chain. Los titulares de CORE pueden proponer y votar mejoras en el protocolo, asegurando que el desarrollo de la red se alinee con los intereses de la comunidad. Este marco democrático facilita actualizaciones, ajustes de parámetros y mantenimiento de estándares de seguridad.
La seguridad reforzada por el consenso Satoshi Plus hace que Core chain sea especialmente atractiva para desarrolladores de contratos inteligentes. Al combinar la potencia de hash de Bitcoin con DPoS, ofrece una protección superior a la de las redes PoS tradicionales, dando confianza a desarrolladores y usuarios sobre la seguridad de sus aplicaciones y activos.
El sistema de validadores de Core chain es un modelo sofisticado que preserva la descentralización de la red, gracias a procesos de elección y mecanismos de incentivos bien diseñados.
El modelo de puntuación híbrida es la base para elegir validadores. Cada candidato recibe una puntuación en función de las contribuciones combinadas de DPoW (potencia de hash delegada por mineros de Bitcoin) y DPoS (staking de titulares de CORE y BTC). Los mineros incorporan información de validador en sus bloques minados, mientras los titulares delegan sus activos a validadores de confianza. Los validadores con mayor puntuación híbrida son elegidos en cada ronda, garantizando la distribución del poder entre distintos grupos de participantes.
Las recompensas para los validadores fomentan una participación honesta. Al final de cada ciclo de elección, reciben comisiones de transacción y nuevos tokens CORE, distribuidos según sus aportaciones. Una parte de estas recompensas se comparte con los titulares que hayan delegado su staking, incentivando la seguridad y la participación comunitaria de forma continua.
El mecanismo de slashing es un elemento esencial contra comportamientos maliciosos. Los validadores que incumplen sus obligaciones o participan en actividades dañinas, como ataques de doble firma o fallos recurrentes en bloques, son penalizados con la pérdida de sus tokens en staking. Esto afecta a su reputación y posibilidad de ser elegidos en el futuro, reforzando la integridad de la red y el comportamiento honesto.
La participación descentralizada se logra mediante un diseño inclusivo, acogiendo mineros de Bitcoin, titulares de CORE y stakers de BTC. Este enfoque multiactor impide que un solo grupo domine la red y fomenta una selección diversa de validadores. Así, la distribución del poder dificulta que cualquier entidad obtenga influencia excesiva en la red o en la gobernanza.
El token CORE es esencial para el funcionamiento de Core chain, desde las transacciones diarias hasta la gobernanza y la seguridad a largo plazo de la red.
Como moneda nativa para las comisiones de transacción, CORE opera de forma similar a ETH en Ethereum. Los usuarios abonan comisiones en CORE al efectuar transacciones o interactuar con DApps en la red. Esta estructura incentiva a los validadores a procesar operaciones de forma eficiente y reduce el spam al vincular un coste a cada acción. El sistema de comisiones ayuda a mantener la eficiencia y asegura que los validadores sean recompensados por sus recursos.
En el ecosistema de staking, CORE es clave para la seguridad de la red vía DPoS. Los titulares pueden delegar su CORE a validadores, contribuyendo a la descentralización y protección de la red. Los stakers reciben recompensas según el rendimiento de los validadores elegidos, lo que representa una oportunidad atractiva de ingreso pasivo y refuerza la estabilidad de la red. Así, los incentivos individuales se alinean con la salud global del sistema.
La gobernanza onchain es una de las funciones más relevantes de CORE. A través de la organización autónoma descentralizada (DAO) de Core chain, los titulares pueden proponer y votar cambios en parámetros de la red, incluyendo ajustes de comisiones, criterios de validadores y actualizaciones de protocolo. Este sistema democrático descentraliza el control y permite que la comunidad dirija la evolución de la blockchain según sus intereses.
La tokenómica de CORE está orientada a la sostenibilidad. Con un límite máximo de 2,1 mil millones de tokens, sigue un modelo deflacionario similar al de Bitcoin. Esta oferta limitada mantiene la escasez y puede incrementar el valor conforme crece la demanda. En el futuro, se podrían implementar mecanismos de quema de comisiones, reforzando el carácter deflacionario y generando valor para los poseedores a largo plazo.
Core chain supone un avance destacado en tecnología blockchain, al fusionar la seguridad de Bitcoin con la versatilidad de los contratos inteligentes de Ethereum. Con su mecanismo de consenso Satoshi Plus, Core chain crea un ecosistema único donde mineros de Bitcoin y titulares de CORE colaboran para proteger y gobernar la red.
La compatibilidad EVM elimina barreras para desarrolladores, facilitando la migración de aplicaciones de Ethereum y promoviendo el crecimiento rápido del ecosistema. Gracias a su escalabilidad superior, capacidades cross-chain y procesamiento de baja latencia, Core chain supera las limitaciones de Bitcoin y Ethereum sin renunciar a sus fortalezas.
El token CORE es el pilar del ecosistema: facilita transacciones, habilita el staking, impulsa la gobernanza y sostiene la economía a través de su modelo deflacionario. A medida que la red evoluciona mediante gobernanza comunitaria, Core chain se posiciona como plataforma líder que integra lo mejor de Bitcoin y Ethereum en un solo ecosistema. Su seguridad, rendimiento y accesibilidad para desarrolladores la convierten en una opción atractiva para la próxima generación de aplicaciones blockchain.
Una core chain es una blockchain impulsada por Bitcoin y compatible con EVM, que utiliza Delegated Proof of Work y Delegated Proof of Stake. Ofrece alta capacidad de procesamiento y bajas comisiones.
Según las tendencias actuales del mercado, se estima que una moneda Core alcanzará un valor cercano a 1,50 $ a finales de 2025, con potencial de crecimiento en los próximos años.
CoreChain es una red de pagos B2B basada en blockchain que automatiza y protege transacciones comerciales, ofrece soluciones de financiamiento y simplifica los procesos de pago.
Bora Obucina es el fundador y CEO de Core-chain. Tiene experiencia en tecnología blockchain y fue Chief Growth Officer en Ubuntu Tribe.











