

PEPE, una criptomoneda inspirada en el célebre meme de internet Pepe the Frog, ha revolucionado recientemente el sector cripto. En este artículo se analizan sus orígenes, características y el futuro potencial de este singular memecoin.
Pepe the Frog, el personaje que da vida a la moneda PEPE, fue creado en 2005 por el dibujante estadounidense Matt Furie para su cómic 'Boy's Club'. Pronto alcanzó gran popularidad en distintas redes sociales, convirtiéndose en uno de los memes más reconocidos de internet. La influencia de Pepe trascendió el humor y, en ocasiones, distintos movimientos políticos online lo adoptaron como símbolo.
PEPE se lanzó en abril de 2023, debutando como un actor relativamente reciente en el mercado de las criptomonedas. A pesar de la longeva fama de Pepe the Frog y el éxito previo de otros memecoins, el nacimiento de PEPE llegó de forma sorprendentemente tardía. Es importante subrayar que la moneda no está vinculada oficialmente a Matt Furie, su creador original. En realidad, constituye un homenaje al icónico personaje meme.
Tras su lanzamiento, PEPE protagonizó una subida meteórica, con una capitalización de mercado que alcanzó cifras relevantes. Este crecimiento acelerado situó a PEPE entre las principales criptomonedas por capitalización, rivalizando con memecoins ya establecidos.
PEPE es un token ERC-20 construido sobre la blockchain de Ethereum. Este aspecto resulta esencial en la estructura de PEPE, ya que responde a la pregunta "¿en qué blockchain está PEPE?". La blockchain de Ethereum le proporciona una plataforma sólida y ampliamente adoptada para su funcionamiento.
La moneda cuenta con un suministro circulante de 420,69 billones de tokens, una cifra elegida, probablemente, por su valor humorístico. PEPE emplea un sistema de redistribución diseñado para recompensar e incentivar a quienes mantienen sus tokens a largo plazo, lo que puede contribuir a la estabilidad del proyecto.
Al lanzarse, el 93,1 % del suministro total se destinó al pool de liquidez y el 6,9 % restante quedó reservado en una cartera multifirma para futuros usos, como listados en plataformas de trading, puentes y gestión de liquidez. Para reforzar la seguridad y la descentralización, los tokens del pool de liquidez se quemaron y el contrato del deployer fue renunciado.
Los creadores de PEPE han presentado una hoja de ruta provisional, remarcando que PEPE es, ante todo, un memecoin sin valor intrínseco ni expectativas de retorno financiero. Su roadmap informal contempla:
Sin embargo, los inversores potenciales deben tener presente la declaración de los creadores: la moneda es "completamente inútil y solo sirve para entretenimiento".
PEPE es un caso de estudio relevante en el sector de las criptomonedas, especialmente en el ámbito de los memecoins. Su ascenso pone de manifiesto el atractivo continuo de los activos digitales basados en memes dentro del mercado cripto. No obstante, como sucede con todos los memecoins, PEPE se caracteriza por una elevada volatilidad y carece de valor intrínseco. Aunque su éxito se relaciona con la popularidad duradera de Pepe the Frog, cualquier inversión en este activo debe abordarse con prudencia, ya que es especulativa y conlleva riesgos significativos. El futuro de PEPE, como el de otros memecoins, sigue siendo incierto y dependerá del interés de la comunidad y de la evolución general del mercado de criptomonedas.
PEPE está principalmente en Ethereum, aunque también está disponible en Solana. El token original de PEPE se lanzó en la red de Ethereum.
PEPE se construye sobre la red de Ethereum como token ERC-20.
El futuro de Pepe Coin es prometedor. Las previsiones indican que podría alcanzar 0,00004500 $ en 2029 si la implicación de la comunidad se mantiene firme y el mercado resulta favorable. Su potencial de crecimiento está vinculado a la evolución general del sector cripto y al sentimiento en redes sociales.











