El precio del oro se mantiene estable, rondando por debajo de los máximos históricos, a la espera de los datos de empleo de EE. UU.

Hoy el precio del oro se mantiene relativamente estable cerca de los 3,550 dólares, personalmente me parece un poco increíble este nivel. Después de todo, fue solo a principios de esta semana cuando el oro alcanzó su máximo histórico de 3,578 dólares. El mercado ahora parece haber entrado en un breve período de espera, todos están esperando la publicación del informe de empleo no agrícola de EE. UU.

Este informe es como una inyección de energía o un cubo de agua fría para nosotros los inversionistas, ya que se convertirá en un indicador clave de la próxima acción de la Reserva Federal. Según lo que he observado, actualmente el dólar se ha debilitado y los rendimientos de los bonos del gobierno están en descenso, estos dos factores siguen proporcionando un fuerte apoyo al precio del oro.

Los datos recientes del mercado laboral ya han revelado signos de enfriamiento. En agosto, el empleo en el sector privado según ADP aumentó solo 54K, muy por debajo de las expectativas; las vacantes de JOLTS también cayeron de 7.36 millones a 7.18 millones; el número de solicitudes iniciales de subsidio por desempleo aumentó a 237K. Los índices de empleo en los sectores de manufactura y servicios se encuentran ambos en la zona de contracción. Estos datos nos dicen claramente que el mercado laboral de EE. UU. está perdiendo impulso.

El mercado ya ha prácticamente fijado un descenso de 25 puntos básicos por parte de la Reserva Federal en septiembre, pero los datos de nómina no agrícola de hoy podrían cambiar esta expectativa. Si los datos son extremadamente débiles, no descarto que la Reserva Federal considere un descenso más agresivo de 50 puntos básicos.

Desde el punto de vista técnico, el precio del oro ha retrocedido ligeramente después de alcanzar un máximo histórico de 3,578 dólares, pero sigue manteniendo un sólido soporte por encima de la media móvil de 50 periodos en el gráfico de 4 horas, situada en 3,469 dólares. Los indicadores de momentum siguen siendo positivos, y aunque el índice de fuerza relativa ha retrocedido desde niveles de sobrecompra, aún se mantiene en 64, lo que indica que los toros controlan la situación.

Para los inversores, el nivel de soporte a observar por debajo es de 3,500 dólares, seguido de 3,450 dólares; si se supera el máximo histórico de 3,578 dólares, podría abrir la puerta a niveles de 3,600 dólares o incluso más altos.

Creo que, en el contexto de una creciente incertidumbre económica global y riesgos geopolíticos persistentes, el atractivo del oro como activo de refugio solo se fortalecerá. Especialmente con la Reserva Federal a punto de comenzar un ciclo de recortes de tasas, esto es una gran ventaja para el oro, que no genera intereses. Aunque puede haber correcciones a corto plazo, la tendencia a medio y largo plazo sigue siendo ascendente.