Las recientes declaraciones de la funcionaria de la Reserva Federal (FED) Daly merecen ser seguidas: ella considera que la economía estadounidense se encuentra atrapada en un bache de debilidad de la demanda, aunque la buena noticia es que la presión inflacionaria derivada de los aranceles parece estar bajo control por ahora.

Daily mencionó especialmente que el impacto de los aranceles se concentra principalmente en los precios de los bienes, mientras que la inflación en el sector de servicios y las expectativas del mercado sobre los precios futuros siguen siendo bastante estables. Su actitud es clara: las políticas deben mantenerse flexibles y se debe hablar después de observar los datos.

Esta declaración en realidad revela una señal: La Reserva Federal (FED) podría disminuir el ritmo en su próxima acción, buscando cuidadosamente un punto de equilibrio entre estimular la demanda y controlar la inflación. Para el mercado, esta estrategia de "ir paso a paso" podría significar un período de mayor espera.