El estancamiento que duró 40 días parece que finalmente está a punto de llegar a su fin.
Esta vez la controversia es realmente mágica: debido a que no se llegó a un acuerdo en el presupuesto, todo el departamento gubernamental se declaró "en cierre". Esta operación se considera un fenómeno político único a nivel mundial. El problema es que este cierre duró más de un mes, y los mercados financieros globales sufrieron las consecuencias. El Nasdaq tembló, el precio de Bitcoin también fue inestable, y las acciones tecnológicas experimentaron una montaña rusa. Incluso los bonos del Tesoro de EE. UU. y el oro, que normalmente se consideran refugios seguros, no pudieron mantenerse al margen, lo que revela cuán tensa estaba la emoción del mercado.
Sin embargo, dicho esto, por muy opuestas que sean las posturas políticas, no se puede ignorar que todos quieren pasar un Día de Acción de Gracias tranquilo. Justo antes del 27 de noviembre, el Senado finalmente logró reunir esos 60 votos clave, impulsando el proyecto de ley de presupuesto hacia adelante. ¿Qué significa esto? Significa que esta histórica paralización probablemente está llegando a su fin, y los próximos procedimientos devolverán todo a la normalidad.
La raíz de este asunto es en realidad bastante simple: los dos partidos no llegaron a un acuerdo sobre el tema del presupuesto fiscal después del 1 de octubre.
Ese día era la fecha límite para el presupuesto federal del año anterior. Aunque actualmente los republicanos controlan ambas cámaras, en el Senado aún les faltan algunos votos para alcanzar el estándar de 60 votos necesarios para la aprobación. Los demócratas están aprovechando esta ventaja. ¿La mayor discrepancia entre ambos? Se centra en una política de gasto en salud. Los demócratas insisten en extender una medida de incentivo fiscal para que millones de personas continúen disfrutando de un seguro de salud relativamente barato.
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
9 me gusta
Recompensa
9
4
Republicar
Compartir
Comentar
0/400
MEVHunter
· hace14h
ya están adelantándose a estos movimientos del mercado... manos débiles fueron destruidas fr
Ver originalesResponder0
fomo_fighter
· hace14h
¿Todo vuelve a ser política? Vaya...
Ver originalesResponder0
orphaned_block
· hace14h
btc va a temblar de nuevo
Ver originalesResponder0
ApeShotFirst
· hace14h
¿Eh? ¿Los políticos han terminado toda la obra? ¡El precio de la moneda va a subir!
El estancamiento que duró 40 días parece que finalmente está a punto de llegar a su fin.
Esta vez la controversia es realmente mágica: debido a que no se llegó a un acuerdo en el presupuesto, todo el departamento gubernamental se declaró "en cierre". Esta operación se considera un fenómeno político único a nivel mundial. El problema es que este cierre duró más de un mes, y los mercados financieros globales sufrieron las consecuencias. El Nasdaq tembló, el precio de Bitcoin también fue inestable, y las acciones tecnológicas experimentaron una montaña rusa. Incluso los bonos del Tesoro de EE. UU. y el oro, que normalmente se consideran refugios seguros, no pudieron mantenerse al margen, lo que revela cuán tensa estaba la emoción del mercado.
Sin embargo, dicho esto, por muy opuestas que sean las posturas políticas, no se puede ignorar que todos quieren pasar un Día de Acción de Gracias tranquilo. Justo antes del 27 de noviembre, el Senado finalmente logró reunir esos 60 votos clave, impulsando el proyecto de ley de presupuesto hacia adelante. ¿Qué significa esto? Significa que esta histórica paralización probablemente está llegando a su fin, y los próximos procedimientos devolverán todo a la normalidad.
La raíz de este asunto es en realidad bastante simple: los dos partidos no llegaron a un acuerdo sobre el tema del presupuesto fiscal después del 1 de octubre.
Ese día era la fecha límite para el presupuesto federal del año anterior. Aunque actualmente los republicanos controlan ambas cámaras, en el Senado aún les faltan algunos votos para alcanzar el estándar de 60 votos necesarios para la aprobación. Los demócratas están aprovechando esta ventaja. ¿La mayor discrepancia entre ambos? Se centra en una política de gasto en salud. Los demócratas insisten en extender una medida de incentivo fiscal para que millones de personas continúen disfrutando de un seguro de salud relativamente barato.