Para ser honesto, los contratos realmente dependen del talento.

Las herramientas son neutrales, la causa de perder dinero sigue siendo uno mismo. Primero hay que entender claramente cuánto uno puede manejar.

Algunas personas simplemente no tienen la personalidad adecuada para tratar con contratos, especialmente aquellas que no tienen mucha sensibilidad con los números. Yo mismo soy un ejemplo: provengo de las ciencias humanas y realmente no soy muy hábil con los números.

Pero también hay quienes nacen con esa habilidad, con una alta sensibilidad a los números, y jugar en ese nivel es otra historia. Reconocer tus propias debilidades es más importante que cualquier otra cosa.