Informe de CEX: Si Bitcoin se sostiene por encima de 110,000 dólares, podría volver a 117,000 a 120,000 dólares.

El 13 de octubre, CEX publicó un informe que indica que la semana pasada el precio de Bitcoin cayó de más de 126,000 dólares a menos de 103,310 dólares, registrando un retroceso del 18.1%, lo que provocó el mayor evento de liquidación en la historia del mercado de criptomonedas en términos de valor nocional. Ether cayó de 4750 dólares a 3500 dólares, y múltiples alts cayeron instantáneamente más del 80% en medio de una drástica reducción de la liquidez. A las 10 de octubre, en un lapso de tres horas, se borraron aproximadamente 1 billón de dólares del total de capitalización de mercado del criptomercado, cayendo temporalmente de un máximo de 4.26 billones de dólares a 3.3 billones de dólares, con liquidaciones en un solo día que superaron los 19 mil millones de dólares. Esta venta fue provocada por agresivas ventas en el mercado al contado, en un momento en que las tensiones arancelarias se intensificaron el 10 de octubre, causando un desequilibrio de ventas y compras de 2.5 veces en las principales plataformas de intercambio. El mercado de futuros agravó la caída, con un volumen de comercio acumulado que muestra que las ventas dominan de manera abrumadora en los mercados al contado y de futuros perpetuos. Históricamente, este tipo de ventas por liquidación impulsadas por el pánico suelen ser seguidas por un rebote mecánico, debido a la contracción de la volatilidad y la eliminación de apalancamiento excesivo. Para Bitcoin, volver a sostenerse por encima de 110,000 dólares confirmará que el mercado entra en una fase de estabilidad y abrirá un objetivo de recuperación de 117,000–120,000 dólares; si no logra sostenerse, podría volver a probar el rango de 100,000 dólares. El contexto económico más reciente de Estados Unidos muestra que la discrepancia entre la intención de políticas de EE.UU. y su impacto real se está ampliando. Las actas de la reunión de la Reserva Federal de septiembre indican que hay profundas diferencias dentro del Comité Federal de Mercado Abierto sobre la velocidad y magnitud de los futuros recortes de tasas. La mayoría de los formuladores de políticas tienden a un mayor alivio para abordar la desaceleración del crecimiento del empleo, mientras que unos pocos están preocupados por el estancamiento en el control de la inflación y advierten sobre no actuar demasiado rápido. La creciente incertidumbre en la política económica, provocada por el continuo estancamiento del gobierno de EE.UU., cambios en la política arancelaria y políticas de inmigración más estrictas, agrava aún más los desafíos. El estancamiento ha llevado a una interrupción en la publicación de datos clave, obligando al mercado a depender de indicadores privados para mostrar la tendencia económica: la economía de EE.UU. se está enfriando, pero aún no se está contrayendo.