Monopolistas del tabaco: ¿quién gobierna el mundo del humo? 💨

Trabajando en el sector financiero, he observado durante años cómo los gigantes del tabaco siguen prosperando a pesar de todas las campañas antitabaco. Personalmente, siempre me ha parecido extraño esta contradicción: ¡sabemos sobre el daño del tabaquismo, pero el negocio del tabaco solo crece! Echemos un vistazo a los verdaderos gobernantes de esta industria de la muerte.

La Corporación Estatal de Tabaco de China es un verdadero monstruo del que pocos hablan. Cada año extrae alrededor de $30 mil millones en ganancias, produciendo el 40% de los cigarrillos del mundo. Y además, no hay informes públicos; la máquina estatal opera en la sombra.

Philip Morris — máquina tabacalera estadounidense con una capitalización de $142 mil millones. $9,1 mil millones de ganancias netas en un año! Hipócritamente invierten en "alternativas seguras" como IQOS, como si eso cambiara algo.

British American Tobacco con una capitalización de $91,6 mil millones es otro gigante occidental cuyas garras han llegado a 180 países. Su ganancia de $8,7 mil millones al año se basa en la adicción de millones de personas.

El monstruo del tabaco japonés JTI con una capitalización de $50 mil millones y ganancias de $4,5 mil millones domina en Japón, donde aparentemente se preocupa tanto por la salud.

Imperial Brands ($24 mil millones de capitalización) hacen $2,2 mil millones en marcas de prestigio como Davidoff, ocultando la adicción a la nicotina bajo un estilo de vida "premium".

Altria Group con su capitalización de $88 mil millones — propietario del famoso Marlboro, que obtuvo $8,3 mil millones de ganancias de los fumadores estadounidenses.

El ITC indio ($55 mil millones) se ha diversificado inteligentemente en la industria alimentaria y hotelera — $2,5 mil millones de beneficios, mientras que otras corporaciones hipócritamente se desmarcan de un producto mortal.

Cierran la lista KT&G (Corea), Swedish Match (Suecia) y Egyptian Eastern Company: menor escala, pero la misma esencia.

Piénsalo: ¡estas empresas se están volviendo más ricas en miles de millones, vendiendo un producto que mata a sus consumidores! Y continúan prosperando, a pesar del endurecimiento de la regulación. Ningún gobierno puede detener este flujo de dinero — es demasiado rentable para todos, excepto para los propios fumadores.