Mercurio y la comunidad $HYPE quieren que Arthur Hayes, destructor de líneas de tendencia e encarnación de la señal máxima, sea prohibido de comprar $HYPE.
¿Por qué? El Indicador Hayes nunca falla: cuando Arthur está largo, tú cortas. Cuando él es alcista...pánico.
Si no se hace nada:
- Cada vela verde lo acerca más a su próximo Ferrari - Los memes cambian de “Hyperliquid” a “cuando Hayes vende” - La comunidad queda atrapada en charlas TED interminables de Arthur Hayes
La idea:
- Poner en la lista negra las carteras de Hayes - Requerir que todos los compradores confirmen: “No soy Arthur Hayes” - Programa de recompensas para cazar billeteras adyacentes a Hayes
Es evidente que la comunidad de Hyperliquid NO quiere que él esté involucrado en absoluto con el ecosistema.
$HYPE o se mantiene protegido o termina siendo otra de las víctimas de Hayes. Una situación interesante, por decir lo menos.
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
Mercurio y la comunidad $HYPE quieren que Arthur Hayes, destructor de líneas de tendencia e encarnación de la señal máxima, sea prohibido de comprar $HYPE.
¿Por qué? El Indicador Hayes nunca falla: cuando Arthur está largo, tú cortas. Cuando él es alcista...pánico.
Si no se hace nada:
- Cada vela verde lo acerca más a su próximo Ferrari
- Los memes cambian de “Hyperliquid” a “cuando Hayes vende”
- La comunidad queda atrapada en charlas TED interminables de Arthur Hayes
La idea:
- Poner en la lista negra las carteras de Hayes
- Requerir que todos los compradores confirmen: “No soy Arthur Hayes”
- Programa de recompensas para cazar billeteras adyacentes a Hayes
Es evidente que la comunidad de Hyperliquid NO quiere que él esté involucrado en absoluto con el ecosistema.
$HYPE o se mantiene protegido o termina siendo otra de las víctimas de Hayes. Una situación interesante, por decir lo menos.