El 17 de septiembre de 2025, las acciones de NVIDIA (NASDAQ: NVDA) perdieron cerca de un 3 % después de que el gobierno chino prohibiera a las grandes tecnológicas nacionales adquirir su último chip de inteligencia artificial, el RTX Pro 6000D. Esta decisión incrementa las tensiones tecnológicas entre Estados Unidos y China y supone un importante desafío para las perspectivas de NVIDIA en el mercado chino.
El 18 de septiembre de 2025, NVIDIA cotizaba a 170,29 $, lo que representa una caída del 2,66 % respecto a la sesión anterior. En la negociación previa a la apertura, la acción llegó a retroceder más de un 3 %, principalmente por la noticia de la prohibición de su chip de IA por parte del gobierno chino. La evolución reciente del precio muestra que NVIDIA afronta una presión creciente, tanto por las circunstancias geopolíticas como por la percepción del mercado.
El regulador de internet de China ha ordenado a las empresas, incluidas las principales tecnológicas, que detengan las compras de chips RTX Pro 6000D de NVIDIA y cancelen los pedidos existentes. El objetivo es reducir la dependencia de tecnología estadounidense y evidencia la escalada en las tensiones tecnológicas entre EE. UU. y China.
El CEO de NVIDIA, Jensen Huang, manifestó su decepción por la resolución y subrayó el compromiso de la compañía con el cumplimiento normativo. Además, afirmó que, ante el contexto geopolítico actual, NVIDIA ha retirado el mercado chino de sus previsiones financieras.
Pese a estos obstáculos, NVIDIA conserva un liderazgo tecnológico en IA, centros de datos y procesamiento gráfico. Si la empresa consigue adaptarse con éxito a los cambios geopolíticos y amplía su presencia en nuevos mercados y clientes, podrá mantener su posición destacada en la industria tecnológica global. Los inversores deberían seguir atentamente los movimientos de NVIDIA en mercados emergentes, así como posibles alianzas o adquisiciones, que pueden ser decisivos para futuras variaciones en la cotización de sus acciones.
NVIDIA (NASDAQ: NVDA) ha registrado recientemente un descenso en la cotización de sus acciones tras las restricciones impuestas por China a la venta de sus chips de IA, lo que pone de relieve el impacto de las disputas tecnológicas entre EE. UU. y China en las empresas internacionales. Los inversores deben observar cómo evoluciona este escenario, valorar cuidadosamente los riesgos y adaptar sus estrategias de inversión en consecuencia.