Corto se refiere a un inversor que predice que el precio de un activo caerá, pidiendo prestado el activo primero y vendiéndolo al precio de mercado actual, y luego recomprándolo para devolverlo después de que su precio haya bajado, obteniendo ganancias de la diferencia entre vender alto y comprar bajo. Esta operación es una operación inversa, adecuada para usar cuando el mercado es bajista.
Los traders primero piden prestados activos (como Bitcoin o acciones) de intercambios u otros tenedores, los venden inmediatamente para obtener efectivo, y cuando el mercado cae al precio objetivo, los compran de nuevo para devolverlos al prestamista, ganando la diferencia después de deducir intereses y comisiones, que es la ganancia neta.
Incluyendo contratos perpetuos y contratos de futuros, el primero no tiene fecha de vencimiento y es adecuado para la tenencia a largo plazo, mientras que el segundo tiene una fecha de entrega fija adecuada para estrategias a corto plazo; los tokens apalancados convierten la venta en corto en una forma de token para facilitar el trading; además, los protocolos DeFi apoyan operaciones de venta en corto sin intermediarios a través de funciones de préstamo.
Corto lleva altos riesgos; si los precios de los activos suben en la dirección opuesta, las pérdidas podrían ser ilimitadas. El interés sobre los valores prestados aumenta el costo de mantener posiciones, y el mercado en rápida evolución puede llevar a la liquidación. El mecanismo de cierre automático también puede acelerar las pérdidas. Es recomendable establecer límites de stop-loss estrictos y operar con cautela.
Durante un mercado bajista o una caída del mercado, cuando surgen noticias negativas y el análisis técnico muestra una tendencia a la baja, como la aparición de una cruz de la muerte, observar múltiples factores para determinar el momento de entrada puede ayudar a aumentar la tasa de éxito de la estrategia de trading en corto.
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