Muchos se preguntan si existe una forma de inversión que no requiera vigilar diariamente los gráficos de velas, que no tema las caídas del mercado y que además permita que los activos crezcan de manera estable.

De hecho, muchas personas con experiencia en inversiones han reflexionado sobre esta cuestión. La cartera de inversión que promete «nunca perder» suena un poco fantástica, pero la lógica detrás no es complicada.

La idea principal es: mediante una asignación científica de activos, encontrar un equilibrio entre diferentes tipos de inversiones. De esta manera, cuando un mercado cae, otras partes pueden estar en alza, compensando así el riesgo. Lo mejor de todo es que esta estrategia puede mantener una rentabilidad anual estable en torno al 8%, y no requiere que seas un experto en trading.

En resumen, consiste en:
- No realizar transacciones frecuentes
- No preocuparse por colapsos del mercado
- Y aún así, acumular riqueza de manera constante

Esto es realmente una buena opción para quienes desean participar en la inversión y el crecimiento del patrimonio, pero sin dejarse llevar por las fluctuaciones del mercado. Por supuesto, toda inversión conlleva riesgos, lo importante es gestionar bien esos riesgos.