A la mayoría de las personas realmente no les importa la descentralización, la resistencia a la censura o el dinero sólido.
Les importa ser los primeros en un gráfico que sube.
El sucio secreto de las criptomonedas es que la ideología es solo marketing — la tecnología es un espectáculo secundario, la especulación es el producto.
Hasta que eso cambie, seguiremos reciclando las mismas narrativas en cada ciclo.
Ver originales